Las lentejas de mi casa

Paola Miglio
Periodista de comida y viajes. Frívola. Obsesiva. Ansiosa. Twitter @paolamiglio / Instagram @paola.miglio
Así me quedaron las lentejas con zanahoria y queso. Foto: Útero.pe
Las lentejas en mi casa se comen con tomate al lado y, a veces, papa picada en cuadritos. Es un plato que no tiene mucho misterio, sin embargo, su sabor es tan tierno y suave que me remite siempre al hogar. Hoy hice una versión un poco distinta. Tomé la receta base y le agregué dos ingredientes: zanahoria en cubitos y queso parmesano que me trajo un amigo de regalo. Hubo magia. Hubo ese encuentro de ingredientes sabroso, inesperado, pero tan familiar. Acá les dejo la preparación. Es fácil y la pueden acompañar con arroz blanco graneado (bastante pecaminoso) y, sin tienen más hambre, un bistec de carne o de hígado frito. Ah, les dejaré también la receta de la ensalada de tomate, compañera inseparable de muchas lentejeadas de infancia.
Ingredientes
Para cuatro personas (si sobra, se la recalientan al día siguiente, porque lo recalentado siempre sabe más rico)
- 1 kilo de lentejas
- 1 cebolla picada en cuadrito pequeños
- 2 dientes de ajo pelados y picados
- Sal
- Pimienta
- Orégano
- Pimiento páprika molido
- 2 zanahorias sancochadas cortadas en cubitos
- Aceite de oliva
- Queso parmesano
Preparación
Dejar remojando las lentejas el día anterior. En la mañana, colocarlas en una olla con agua que apenas las cubra. Cocinar a fuego normal por, aproximadamente, 20 minutos. Así quedan cremosas. Luego, hacer un sofrito con cebolla, ajo y pimiento. Cuando esté listo (la cebolla está transparente), agregar un poco de orégano seco. Luego, incorporar las lentejas cocidas con el agua en el hirvieron y dejar que la mezcla se integre por cinco minutos hasta que concentren los sabores. Al final, sal al gusto y la pimienta. Cuando las lentejas están listas, agregan la zanahoria y rallan un poco de queso parmesano sobre la mezcla. Luego un chorro de aceite de oliva y revuelven lentamente. Sirven en plato hondo. Acompañan con arroz blanco, carne o ensalada. Y son felices (y sin Ajinomoto).
*Los tomates
Solo como los tomates crudos picados en cuadritos. Sí, es una manía, pero todos tenemos alguna, así que no hay drama. Esta receta es facilita y acompaña las lentejas de maravilla. Cortan un tomate en cuadrados pequeños y los colocan en un recipiente hondo. Agregan un chorro de vinagre balsámico (cuando no tengo uso de manzana), otro chorro de aceite de oliva (sean generosos), sal y pimienta. Revuelven bien y listo. Cuando elijan los tomates, traten de que estén a punto, así no quedan tan duros y sus jugos se mezclan bien con el resto del menjunje.

Así quedan las lentejas con tomate. Foto: Útero.pe
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