Una rápida sopa de pollo para aliviar las penas

Paola Miglio
Periodista de comida y viajes. Frívola. Obsesiva. Ansiosa. Twitter @paolamiglio / Instagram @paola.miglioTodos tenemos una receta especial de sopa de pollo casera. Probablemente la que preparen sus mamás, papás o abuelas sea la mejor que han comido. Aquí va la mía: sencilla, rápida y sin dramas. Perfecta para aliviar un dolor de panza, una garganta herida, un atroz resfriado o un día de depresión. Tomen nota y a gozar.
Ingredientes
(Para dos personas, y que quede para la noche)
- 1 pechuga de pollo sin hueso
- 5 papas amarillas medianas (yo las pongo con cáscara)
- 1 trozo de espinazo (para dar sabor, porque la pechuga es medio sosa)
- 1 poro
- 1 zanahoria
- 1 trozo de kión
- Pasta cabello de ángel
- Sal
Preparación
Colocar en una olla grande las pechugas, el espinazo y el kión. Agregar agua hasta cubrir ¾ de la olla. Incorporar las papas bien lavadas, la zanahoria cruda en rodajas, el poro picado en rodajas (incluso la parte verde) y la sal. Dejar hervir a fuego medio hasta que todo se haya cocido. Rectificar la sal. Finalmente agregar los fideos crudos al gusto y esperar que se cocinen. No demora mucho, será entre tres y dos minutos. Listo. Tomar calentita.
Más procrastinación
